Con el retorno reciente de los migrantes mexicanos, miles de estudiantes con experiencia escolar en Estados Unidos se incorporaron a las escuelas mexicanas. El objetivo de este artículo es analizar la adaptación lingüística de estos estudiantes en una ciudad con alto retorno, Tijuana, México. Se utiliza metodología mixta que comprende el análisis de la Encuesta de Migración e Integración Escolar 2017, así como treinta y seis entrevistas semiestructuradas realizadas a estudiantes transnacionales en 2018 y 2019. Los hallazgos sugieren un proceso paulatino de aprendizaje del español y pérdida del inglés a mayor tiempo en México desde el último arribo, así como la existencia de competencias lingüísticas desiguales según la socialización escolar en cada país, el país de identificación cultural y nacimiento, el capital económico, social y cultural de los hogares, y los apoyos de maestros y compañeros. Se requieren políticas públicas que favorezcan el bilingüismo en las escuelas de ambos países.