En un estudio cistemográfico anterior de la circulación del líquido cefalorraquídeo (LCR) en pacientes esquizofrénicos, se encontraron señales de perturbación de la dinámica de flujo en 10 de 30 sujetos. Para replicar este resultado e investigar su significación clínica y patofisiológica, se examinaron 39 pacientes esquizofrénicos y 42 sujetos sanos con un método mejorado para la medición de la circulación del LCR. Se inyectó intratecalmente DTPA-Tc99“1 y se evaluaron a ciegas los cistemogramas gamma. Se calcularon correlaciones entre los resultados de la cistemografía y la edad, la duración de la enfermedad, las hospitalizaciones previas, los síntomas positivos o negativos, la exposición a neurolépticos, la historia psiquiátrica familiar, los hallazgos de TC y los niveles de proteína, triptófano y metabolitos de monoaminas en el LCR. Siete de los pacientes mostraron anomalías en los cistemogramas, con lentitud u obstrucción del flujo de LCR sobre las convexidades (P < 0,01), mientras que ninguno de los sujetos sanos mostró anomalías. No hubo correlaciones entre la perturbación de la circulación del LCR en los pacientes y los parámetros clínicos y bioquímicos. De este modo, se desconoce la significación de las desviaciones, similares a otras aberraciones biológicas encontradas en pacientes esquizofrénicos. Avances recientes en imágenes de resonancia magnética ofrecen nuevas posibilidades para examinar con mayor detenimiento las anomalías de la circulación del LCR en la esquizofrenia.