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Investigaciones anteriores sobre la actividad del eje hipotálamo-hipófiso-suprarrenal (HPA) en personas que han intentado suicidarse han mostrado resultados contrapuestos. El propósito del presente estudio era examinar la influencia de los trastornos de personalidad y los diagnósticos concomitantes del eje I en la prueba diagnóstica de supresión con dexametasona utilizando análisis de regresión múltiple. La muestra constaba de 184 pacientes con un intento de suicidio reciente y 42 controles sanos. Como se esperaba, las concentraciones de cortisol pre- y posdexametaxona más bajas se encontraron en los pacientes con trastornos de la personalidad del eje II, grupo B, comparado con los demás pacientes. Los resultados fueron significativos cuando se analizaron para la covarianza con los diagnósticos del eje I del DSM-III-R, la edad o el sexo. Queda por esclarecer si estas concentraciones bajas de cortisol se deben a la experiencia anterior de acontecimientos estresantes extremos o una carga duradera, o si pueden ser consecuencia de una predisposición biogenética o psicológica de interés. Es preciso examinar con más detenimiento la comorbilidad del eje I.
Este estudio evaluó las medicaciones psiquiátricas y su letalidad potencial en una muestra representativa de intentos de suicidio.
Materiales y métodos
Durante 1996-98, se estudiaron 563 intentos de suicidio en un hospital general en Madrid (España). Se utilizó sobredosis de medicación en 456 de los intentos (81%). La proporción entre la dosis tomada y la dosis de prescripción máxima recomendada se usó para evaluar la toxicidad de la medicación.
Resultados
Las benzodiacepinas fueron los fármacos utilizados más a menudo en la intoxicación voluntaria (65% de las sobredosis), seguido por los nuevos antidepresivos (11%), los antidepresivos tricíclicos (ATC) (10%) y los antipsicóticos (8%). Una sobredosis con cualquiera de estas tres últimas medicaciones psiquiátricas era significativamente más frecuente en los pacientes a quienes se prescribió esas medicaciones. Las sobredosis para ATC eran potencialmente letales en el 47% de los casos. Sin embargo, todos los pacientes que tomaron sobredosis de medicaciones psiquiátricas se recuperaron bien y fueron dados de alta sin secuelas.
Discusión
Este estudio indica que las medicaciones psiquiátricas, particularmente las benzodiacepinas, los nuevos antidepresivos y los antipsicóticos, son relativamente seguras cuanto se utilizan para intoxicación voluntaria. Si los pacientes con enfermedades mentales no reciben tratamiento suficiente, hay un riesgo claro y documentado más alto de suicidio.
Conclusión
Es mejor prescribir medicaciones psiquiátricas, particularmente las nuevas, en lugar de negarlas debido a un temor exagerado a una sobredosis letal.
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