La cuenca de la Laguna Merín fue habitada, durante cinco milenios, por pueblos constructores de montículos, responsables de la modificación antrópica más notable que experimentaron las llanuras de las latitudes medias sudamericanas. La composición, tamaño, densidad y distribución de los sitios hizo que las investigaciones se centraran en los procesos de "complejización". Similitudes con otros contextos motivaron la adopción de modelos explicativos generados para otras realidades culturales, causando la pérdida de visión de lo propio del registro regional. A través de la dimensión espacial y temporal se aborda el fenómeno cultural, discutiendo las interpretaciones funcionalistas. Más de 80 dataciones 14C sustentan que estas construcciones se elevaron en forma paulatina y continua. La distribución muestra que los sitios se concentran en los lugares de mayor productividad. Los ciclos de crecimiento de los montículos de India Muerta - Paso Barrancas evidencian vínculos con la historia ambiental. Por otra parte dentro de los conjuntos de montículos se advierten arreglos y distancias que se repiten entre sitios. Al interpretar el crecimiento de cada cerrito como asociado a un actor social, observamos como distancias y arreglos espaciales pasan a tener significado social; comportándose el registro, en desarrollo temporal, como un sistema de reproducción social.