Vida y costumbres de la Madre Andrea
Published online by Cambridge University Press: 14 February 2023
Summary
Desnuda nací y para prueba de que no engañada ni perdida me veo, y dejo ver de muchos del mismo modo, desnuda me veo, que es lo mismo que pobre pero con tanta honra, que han tenido muchos que quitarme, pero sin violentarme. Porque yo espontánea y liberalmente la repartía, quedándome sin ella; mas no fui tan necia que no pidiese en recompensa el metal que la fortuna a tantos niega, que esa fue la lección primera con que me educó mi madre, que Dios tiene Él sabe adonde; la cual abracé con grande ánimo, por ser tan provechosa para mi remedio, si no del cielo abajo, del infierno arriba.
Afirmaban las vecinas que mi bendita madre era cual decían dueñas; informéme de la comadre, y aseguróme que mi padre era propiamente padre, porque mi madre como a confesores les descubría el pecho y no tenía cosa que no les hiciese patente.
Esto me certificó cuando vide muchos en un entierro que desenterrando a mi genitora miraron para mí y se comenzaron a reír y decían: “allí va la inocente de Andrea”; uno murmuraba: “yo le hice la boca,” otro: “yo los ojos, queen lo vivo se parecen a los míos.” Y cada uno se aplicaba una facción, y el más velhaco de todos soltó la maldita y dijo: “pues yo también ajudé y pienso que hice la madre y la puerta por donde le entra el socorro, y voto a tal, que quiero me dé lo mío o por lo menos que me lo preste, que no será incesto, pues una parte viene a ser ninguna respecto del todo que obraron vuestras mercedes.” Considérese agora cuál quedaría yo oyendo ignominias semejantes. Disimulé, que cuando es imposible la venganza, es el acto de la mayor prudencia.
- Type
- Chapter
- Information
- The Life and Times of Mother AndreaLa vida y costumbres de la Madre Andrea, pp. 34Publisher: Boydell & BrewerPrint publication year: 2011