Durante mucho tiempo, existió una tendencia en arqueología de concebir los espacios cordilleranos como limitantes para la movilidad e interacción, ya sea por su característica de barrera o de ambiente marginal (Aldenderfer Reference Aldenderfer1998; Beall Reference Beall2001; Borrero Reference Borrero, Mondini, Muñoz and Wickler2004; Borrero y Borrazo Reference Borrero, Borrazo, Borrero and Borrazo2011; Stern Reference Stern2018, entre otros). Para la región centro sur de Chile y la Patagonia noroccidental argentina se ha sostenido una perspectiva diferente en términos generales (Hajduk Reference Hajduk1986; Munita et al. Reference Munita, Adán and Mera2010; Pérez y Reyes Reference Pérez and Reyes2009; Pérez et al. Reference Pérez, Lucero and Sacchi2021, entre otros), y sobre todo, considerando diversas líneas de evidencia como el arte rupestre (Bellelli et al. Reference Bellelli, Scheinsohn and Podestá2008; Pérez y Salaberry Reference Pérez and Salaberry2014; Vargas Reference Vargas2020), la alfarería (Pérez Reference Pérez, Floria and Delrio2011, Reference Pérez2017; Pérez y Reyes Reference Pérez and Reyes2009; Pérez et al. Reference Pérez, Schuster and Jofré2018), moluscos marinos (Leonardt Reference Leonardt2016; Pérez Reference Pérez, Schuster and Pérez2020; Pérez y Batres Reference Pérez and Batres2010), la metalurgia (Berón et al. Reference Berón, Di Biase, Musaubach and Páez2017; Campbell et al. Reference Campbell, Carrión, Figueroa, Peñaloza, Plaza and Stern2018; Mera et al. Reference Mera, Mille, Munita and Figueroa2015; Salazar Siciliano y Berón Reference Salazar Siciliano, Berón, Nicoletti and Núñez2013) y la explotación de materias primas líticas de obsidiana (Pérez et al. Reference Pérez, Lucero and Sacchi2021). En este último punto, el caso más representativo es el del grupo químico Portada Covunco (PC1), cuya zona de dispersión nuclear se localiza en el centro este de Neuquén, Argentina. Este grupo está presente en sitios de cordillera, valles centrales y costa, incluso insulares, del centro sur de Chile (Campbell et al. Reference Campbell, Stern and Peñaloza2017; Pérez et al. Reference Pérez, Giesso and Glascock2019; Stern Reference Stern2018; Stern et al. Reference Stern, Christian, Navarro and Muñoz2009). El mismo parece representar una selección cromática denominada variedad atigrada (Campbell et al. Reference Campbell, Stern and Peñaloza2017, Reference Campbell, Carrión, Figueroa, Peñaloza, Plaza and Stern2018; Peñaloza et al. Reference Peñaloza, Roberto Campbell, Stern, Otero, Svoboda and Banegas2019), una de las múltiples expresiones macroscópicas de tipo cromático del grupo químico PC1.
En este trabajo consideramos que el aprovisionamiento de rocas de muy buena calidad para la talla, como la obsidiana, pudo haber formado parte de las estrategias de movilidad de los grupos humanos que habitaron el área centro sur de Chile. Debido a esto, es probable que los grupos químicos identificados en los conjuntos líticos puedan estar subrepresentados por otras causas, como el tipo de muestreo para seleccionar y las técnicas analíticas implementadas.
Para comenzar a explorar esta hipótesis de trabajo, nos propusimos analizar una pequeña muestra de obsidianas a través de técnicas no destructivas. Se trata de un sitio previamente conocido, pero cuyos artefactos no fueron analizados químicamente. De esta manera, esperamos que el análisis no selectivo e integral permita distinguir una mayor variedad entre los grupos químicos observados, incluso alguno no identificado previamente para la región centro sur de Chile.
En trabajos previos, Stern (Reference Stern2018) observa que las obsidianas de los Andes chilenos son de composición subalcalina, mientras que aquellos provenientes de las pampas de Argentina al este de los Andes son alcalinas y peralcalinas. Caracteriza las áreas de distribución de los grupos químicos, estableciendo un rango de circulación de >300 km para las distintas fuentes primarias conocidas de la Patagonia y la Araucanía como una característica regional (Stern Reference Stern2018). A este rango se agrega otro más restringido de 50 km para grupos químicos que se presentan en fuentes secundarias de la Patagonia noroccidental (Pérez Reference Pérez2010; Pérez et al. Reference Pérez, Giesso and Glascock2019). Dentro de este, los sitios presentan desechos de talla con distintos porcentajes de corteza y evidencias de formatización de instrumentos de un mismo grupo químico. Por encima de este rango los sitios presentan instrumentos formatizados y desechos derivados del mantenimiento y reactivación de los mismos (Pérez Reference Pérez2010).
Para el caso de Norpatagonia y la Araucanía, donde se encuentran representadas las fuentes Portada Covunco (PC1), Cerro Las Planicies-Lago Lolog (CP-LL1) y Paillakura (PK) en el sector cordillerano oriental, y la fuente Nevados de Sollipulli/Melipeuco (NS/MEL)Footnote 1 en el sector occidental, las expectativas de Stern (Reference Stern2018) y las de Pérez y colaboradores (Reference Pérez, Giesso and Glascock2019) implicarían la presencia de estos grupos químicos en ambas vertientes cordilleranas. La escasa representación e incluso ausencia de dichos grupos en el registro arqueológico de la zona centro sur de Chile llevó a Stern a pensar que podría deberse a una barrera biogeográfica conformada por la cordillera andina boscosa (Stern Reference Stern2018). En este sentido, Campbell y colaboradores (Reference Campbell, Stern and Peñaloza2017, Reference Colombo and Flegenheimer2018), ante identificación del grupo químico PC1 en el sector occidental cordillerano, plantean que se trata de un transporte selectivo de obsidiana bicolor (negra y roja) por su carácter exótico y bien de prestigio, el cual materializaría la existencia de una intensificación de las redes de intercambio como reflejo de una creciente diferenciación social (Campbell et al. Reference Campbell, Stern and Peñaloza2017, Reference Campbell, Carrión, Figueroa, Peñaloza, Plaza and Stern2018; Peñaloza et al. Reference Peñaloza, Roberto Campbell, Stern, Otero, Svoboda and Banegas2019). En otra línea interpretativa, Pérez y colaboradores (Reference Pérez, Giesso and Glascock2015, Reference Pérez, Giesso and Glascock2019) han postulado que la distribución de la obsidiana correspondería a una litificación del paisaje que contempla distintos conocimientos y accesibilidad en tiempo y espacio a las múltiples fuentes primarias y secundarias a ambas márgenes de la cordillera, y por lo tanto la movilidad pudo incluir un componente de planificación en el aprovisionamiento de obsidianas durante el ciclo anual de movilidad.
Por otro lado, también se ha sugerido que la representación de grupos químicos en sitios arqueológicos está fuertemente sesgada por las limitaciones de las técnicas analíticas utilizadas, especialmente las de carácter destructivo que restringen el análisis a desechos de tamaños iguales o mayores a 3 cm y deja fuera desechos de menor tamaño y a los instrumentos completos. Además, que la selección por color está sobredimensionada por ser dichas obsidianas escasas y por estar representadas en mayor número por instrumentos manufacturados en forma de acompañamiento de ajuares funerarios más que sitios residenciales (Pérez et al. Reference Pérez, Giesso and Glascock2015, Reference Pérez, Giesso and Glascock2019). Por otra parte, observamos que las muestras analizadas provienen en mayor medida de sitios emplazados en sectores costeros septentrionales y australes, mientras que los del interior, en valles centrales y cordillera, se concentran hacia el norte del cordón Mahuidanche-Lastarria. Por este motivo el área de muestreo se encuentra en una latitud más próxima a los grupos químicos NS/MEL y PC1 que a las del Parque Nacional Lanín y áreas cercanas: CP-LL1, PK, YC (Yuco), QU/AP (Quilahuinto/Pocahullo), MQ (Meliquina) y FHH (Filo Hua-Hum).
El área centro sur de Chile cuenta con referencias publicadas de 16 sitios arqueológicos distribuidos entre cordillera, valles centrales y costa, que suman una muestra de 106 artefactos de obsidiana. De ellos, el 82% (n = 87) fueron analizados químicamente (Campbell et al. Reference Campbell, Stern and Peñaloza2017, Reference Campbell, Carrión, Figueroa, Peñaloza, Plaza and Stern2018). El 70% (n = 61) corresponde al grupo químico NS/MEL, el 24% (n = 21) corresponde a PC1, y el 6% (n = 5) corresponde a CH (Chaitén). La distribución de estos grupos se da tanto en sectores insulares como en cordillera, a excepción del grupo CH que se encuentra en los sectores australes del área de estudio (Campbell et al. Reference Campbell, Stern and Peñaloza2017; Peñaloza et al. Reference Peñaloza, Roberto Campbell, Stern, Otero, Svoboda and Banegas2019; Pérez et al. Reference Pérez, Giesso and Glascock2019; Stern Reference Stern2018).
El restante 18% de referencias se reparte entre 13 muestras no analizadas y seis de fuentes desconocidas (Campbell et al. Reference Campbell, Stern and Peñaloza2017). Otros sitios publicados que mencionan la presencia de obsidiana son Coronel-2, La Candelaria, Trentrenkuel y Villa José Muñoz Concha-1 Labranza (en adelante, Villa JMC-1 Labranza; ver Figura 1), todos ellos emplazados en el sector de valles centrales (Campbell et al. Reference Campbell, Stern and Peñaloza2017).
Respecto a la cronología, los grupos químicos NS/MEL y CH están representados en la secuencia regional a lo largo de buena parte del Holoceno, mientras que PC1 cobra mayor visibilidad durante el Holoceno tardío, especialmente hacia el período Cerámico e Histórico que abarca los últimos 2.000 años aP (Campbell et al. Reference Campbell, Stern and Peñaloza2017; Peñaloza et al. Reference Peñaloza, Roberto Campbell, Stern, Otero, Svoboda and Banegas2019; Pérez et al. Reference Pérez, Giesso and Glascock2019; Stern Reference Stern2018).
Aspectos teórico-metodológicos
A través de un enfoque organizacional de la tecnología (sensu Nelson Reference Nelson1991), se realiza un acercamiento al conocimiento de los planes que orientaron la dinámica del comportamiento tecnológico de los grupos que ocuparon los ambientes del sector occidental cordillerano.
En este marco, la selección de materias primas líticas está condicionada por múltiples variables, entre ellas la calidad para la talla (Nami Reference Nami1992), el peso (Beck et al. Reference Beck, Taylor, Jones, Fadem, Cook and Millward2002) y otros factores como los sociales (Colombo y Flegenheimer Reference Colombo and Flegenheimer2013; Flegenheimer y Bayón Reference Flegenheimer, Bayón, Madrazo, Mazzanti, Berón and Oliva2002; Nami Reference Nami1992; Taçon Reference Taçon1991, entre otros). El acceso a los recursos líticos está condicionado por la estructura regional de materias primas (Ericson Reference Ericson, Ericson and Purdy1984), definida por la relación entre disponibilidad, distribución y accesibilidad a las fuentes de abastecimiento (Flegenheimer y Bayón Reference Flegenheimer, Bayón, Madrazo, Mazzanti, Berón and Oliva2002). Los costos de aprovisionamiento y las decisiones tecnológicas que involucran el uso de los recursos líticos dependen, en gran parte, de la interacción de factores naturales y culturales.
Las estrategias de adquisición de los recursos líticos se basan en el costo de obtención a partir del costo del transporte. Este se encuentra determinado por la distancia entre el lugar de uso de la herramienta y la fuente de materia prima, resultando en estrategias integradas (embedded sensu Binford Reference Binford1979) o no integradas (ver Bamforth Reference Bamforth1986). Si bien cada estrategia responde a diferentes factores (materia prima, recursos, movilidad, etcétera), un mismo grupo puede optar por una u otra, de acuerdo con distintas circunstancias.
Materiales y métodos
Los materiales de Villa JMC-1 Labranza fueron excavados entre los años 2008 y 2009 por Mera (Reference Mera2014). La colección del sitio es de acceso público y se encuentra en el Museo Regional de La Araucanía, Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos, Chile. La revisión de la colección y del informe técnico del rescate revela que sólo cinco de los ocho artefactos (62,5%) de obsidiana mencionados cuentan con asociación estratigráfica y radiocarbónica. Para este trabajo utilizaremos las cinco muestras mencionadas.
El análisis se efectuó con el analizador portátil no destructivo Brucker Tracer 5i, del Laboratorio de Cultura Material del Departamento de Antropología de la Universidad Católica de Temuco. Se utilizó la modalidad “Obsidiana” del software de calibración desarrollado por el Missouri University Reactor Research (MURR) con sistema de calibración EasyCal, que utiliza el conjunto de referencia MURR OB40. Se usó un colimador de 3 mm y filtro de Negro de 200 μm Cu, y cada exposición duró 60 segundos. La lectura calibrada o programada como una única fase registró y cuantificó 10 elementos pesados: manganeso (Mn), hierro (Fe), zinc (Zn), galio (Ga), rubidio (Rb), estroncio (Sr), itrio (Y), circonio (Zr), niobio (Nb), plomo (Pb) y torio (Th) (Tabla 1). A continuación, mediante los valores de rangos màximos y minimos o valores promedios publicados de grupos químicos previamente caracterizados, varios de ellos de procedencia conocida (Tabla 2), se establecieron correlaciones entre los elementos Rb, Sr y Zr (Tabla 3), comúnmente utilizados para discriminar grupos químicos y fuentes de procedencia (Glascock y Ferguson Reference Glascock and Ferguson2012; Shackley Reference Shackley1998). Para ello utilizamos el software Artax, que permite graficar los resultados. Algunos grupos químicos, como CP-LL1, MQ y PC1, presentan rangos que pueden solaparse para algunos elementos, pero hemos podido diferenciarlos por medio del elemento Nb, y Pérez y colaboradores han aportado información oportunamente a esta discusión en trabajos previos (Pérez et al. Reference Pérez, López and Stern2012, Reference Pérez, Giesso and Glascock2015, Reference Pérez, Giesso and Glascock2019).
Fuente: Pérez et al. Reference Pérez, Lucero and Sacchi2021.
Nota: Las distancias son lineales.
Para la clasificación tecno-tipológica utilizamos la propuesta de Aschero (Reference Aschero1975, Reference Aschero1983), incorporando algunas categorías de Nami (Reference Nami1986), Ericson (Reference Ericson, Ericson and Purdy1984), Bamforth (Reference Bamforth1986) y Andrefsky (Reference Andresfky1994).
La muestra
La muestra está compuesta por cinco artefactos (Figura 2) de obsidiana procedentes del sitio Villa JMC-1 Labranza (38°45′S-72°44′, 82 msnm), región de la Araucanía (Figura 1). Se localiza 10 km al norte de la ciudad de Temuco, en el centro del valle del Río Cautín, cuenca hídrica que se encuentra entre las montañas y volcanes de la cordillera de los Andes y el Océano Pacífico. Los artefactos analizados fueron asociados al complejo Pitrén del período Cerámico temprano, con una cronología de aproximadamente 1100-800 aP (Mera et al. Reference Mera, Mille, Munita and Figueroa2015).
Se trata de un espacio formal de entierros humanos emplazado sobre una antigua terraza fluvial del Río Cautín. En el sitio se identificaron importantes evidencias sobre patrones funerarios, la cual incluiría quemas rituales, y la presencia de artefactos cerámicos, antropomorfos y zoomorfos completos y semicompletos, cuentas de collares de materias primas líticas poco frecuentes, como la lutita y otras de moluscos bivalvos del Pacífico del género Pecten (Mera et al. Reference Mera, Mille, Munita and Figueroa2015); también cordelería y textilería de fibra vegetal y animal respectivamente (Bracchitta y Seguel Reference Bracchitta and Seguel2009), junto a la más temprana y austral evidencia de ornamentos de cobre (Mera et al. Reference Mera, Mille, Munita and Figueroa2015). A estas evidencias se suman aproximadamente 133 artefactos y ecofactos líticos, asociados a distintos rasgos, varios de ellos correspondientes a inhumaciones (Mera Reference Mera2014). Dentro de esta muestra se describen artefactos manufacturados en basalto y andesita, y en una mínima proporción, artefactos de obsidiana (Mera Reference Mera2014). De estos últimos, cinco presentan asociaciones estratigráficas y contextuales y por ende serán incluidos en el análisis.
Artefactos analizados
• Muestra #1: Bolsa 1, caja 1. Medidas 51 × 39 × 7 mm y un peso de 11,3 gramos. Se trata de instrumento incompleto con fractura proximal sobre lasca primaria de obsidiana bícroma (negro y rojo) en bandas o atigrada. Presenta tres filos activos simétricos (cuchillos y posible muesca) manufacturados por medio de retoque marginal.
• Muestra #2: Bolsa 67. Medidas 37 × 18 × 12 mm y un peso de 7,5 gramos. Se trata de un instrumento activo cortante/cuchillo sobre lasca de dorso cortical de obsidiana bícroma (negro y rojo) en bandas o atigrada. Presenta un filo utilizado o posiblemente retocado en forma sumaria.
• Muestra #3: Bolsa 32, pasillo rasgo 21. Medidas 30 × 14 × 4 mm y un peso de 1,1 gramos. Punta de proyectil pedunculada de obsidiana policroma traslúcida con bandas negras/grises.
• Muestra #4: Bolsa 57. Medidas 17 × 22 × 3 mm y un peso de 1,2 gramos. Se trata de un fragmento proximal de lasca angular de obsidiana negra vítrea. Presenta retoque o rastros de uso en uno de sus filos.
• Muestra #5: Bolsa 57, casa 1, franja B. Sin registro de medidas y peso (ver escala en Figura 2). Fragmento de filo natural con rastros de utilización y posibles retoques sobre lasca angular. Variedad polícroma negra con vetas grises.
A continuación se presentan los resultados de los análisis XRF para cada una de las muestras (Figuras 2 y 3, Tablas 1 y 3).
Resultados
A continuación se presentan los resultados del análisis realizado a las cinco muestras, la caracterización de grupos químicos y la distancia lineal a las fuentes de procedencia conocidas.
El análisis de las cinco muestras comparando los elementos Rb/Zr y Rb/Sr nos permitió separar dos grandes grupos químicos (Tabla 3 y Figura 3). El primero corresponde al grupo químico NS con las muestras 2 y 5. El segundo grupo está compuesto por tres muestras en apariencia similares, aunque la muestra 3 se separa de la 1 y la 4 ya que corresponden a dos grupos químicos diferentes, CP-LL1 y PC1 respectivamente (Tablas 1, 2 y 3). Esta segmentación se corresponde además con otros elementos que utilizamos comúnmente para distinguirlos, como el Nb, además de que macroscópicamente sus diferencias son notables y han sido ya discutidas en trabajos previos (Pérez et al. Reference Pérez, Giesso and Glascock2015, Reference Pérez, Giesso and Glascock2019).
Discusión
Si bien el conjunto analizado es pequeño, permite hacer una serie de planteos exploratorios sobre la presencia de distintos tipos de obsidianas. La muestra presenta cuatro obsidianas polícromas. Entre estas, dos de la variedad cromática negro-rojo, una traslúcida-negra y una negra-gris. La variedad cromática rojo-negro proviene de dos fuentes diferentes: una es NS/MEL en la cordillera araucana en Chile y la otra es PC1 en la estepa de Neuquén, Argentina (ver Figuras 1 y 4). En ambos lugares esta variedad es la de menor disponibilidad en el paisaje, pero su accesibilidad es similar a la de otros grupos cromáticos. La muestra traslúcida-negra tiene su fuente en el sector boscoso y lacustre del Lago Lolog, también en Neuquén, Argentina (ver Figuras 1 y 4). Las fuentes de la muestra de color negro, correspondiente químicamente a NS/MEL, se encuentran en los Nevados de Sollipulli y alrededores en la región de la Araucanía, Chile.
Es interesante que sólo dos de las muestras analizadas tienen una distribución occidental cordillerana, específicamente de la fuente Melipeuco/Sollipulli, emplazada a 110 km lineales hacia el este del sitio. Las tres restantes tienen distribución en la vertiente oriental de los Andes. Las fuentes secundarias de PC se localizan 170 km lineales al este de Villa JMC-1 Labranza (Pérez et al. Reference Pérez, Giesso and Glascock2015; Salazar y Stern Reference Salazar Siciliano and Stern2013). Finalmente, CP-LL1 se encuentra a 180 km lineales en dirección sureste.
En el caso de la muestra de CP-LL1, se trata de uno de los primeros registros occidentales cordilleranos, siendo su textura vítrea (cristalina) y policromía sus características más sobresalientesFootnote 2 (ver Figuras 4 y 5). En cuanto al uso de la variedad polícroma de PC1, estos resultados representan la presencia en el registro continental de la variedad negra, ya que la variedad polícroma fue identificada en Isla Mocha (Campbell et al. Reference Campbell, Stern and Peñaloza2017). También contamos con el registro de otra policroma negra-gris entre la variedad cromática utilizada del grupo químico NS/MEL.
Es interesante que, de acuerdo con Campbell y colaboradores (Reference Campbell, Carrión, Figueroa, Peñaloza, Plaza and Stern2018), la obsidiana reaparece en los valles centrales hacia aproximadamente 1000 aP en los contextos de Villa JMC-1 Labranza luego de estar ausente durante todo el período Alfarero temprano. En estos momentos es utilizada en el área cordillerana de Villarrica y Calafquén, donde su presencia es considerada local (Campbell et al. Reference Campbell, Carrión, Figueroa, Peñaloza, Plaza and Stern2018). Asimismo, de acuerdo con los autores, a partir de estas fechas se distribuyó en otros sitios del valle central, la costa septentrional e incluso sitios insulares como Isla Mocha (Campbell et al. Reference Campbell, Carrión, Figueroa, Peñaloza, Plaza and Stern2018). En estos últimos se presenta exclusivamente en forma de productos manufacturados como puntas de proyectil triangulares apedunculadas de la variedad cromática negro y rojo (atigrada), procedente en su mayoría de la fuente PC, distante a unos 390 km lineales en el sector oriental de los Andes (Peñaloza et al. Reference Peñaloza, Roberto Campbell, Stern, Otero, Svoboda and Banegas2019). Debido a esto fue atribuido a un bien de prestigio, dada su baja representación en el registro de la isla y a que, cuando están presentes se trata de estos tipos artefactuales. Atribuyen la circulación de este bien a redes de intercambio mayores entre los espacios insulares y continentales que permitirían establecer alianzas con otros grupos (Peñaloza et al. Reference Peñaloza, Roberto Campbell, Stern, Otero, Svoboda and Banegas2019).
Por otro lado, se encontraron obsidianas químicamente similares a las del CP-LL1 en sitios con diversa localización geográfica (Figuras 4 y 5): hacia el este, en el área del Lago Meliquina (Pérez y López Reference Pérez and López2007), en la estepa rionegrina (Fernández y Vitores Reference Fernández, Vitores, Pifferetti and Dosztal2015), en la meseta de Somuncura (Boschín y Massaferro Reference Boschín and Massaferro2014), en La Pampa (López et al. Reference López, Pérez, Batres and Stern2009) y en el Golfo de San Matías, a 560 km de la fuente (Alberti et al. Reference Alberti, Cardillo, Stern and Dubois2016; Favier Dubois et al. Reference Favier Dubois, Stern, Cardillo, Salemme, Santiago, Álvarez, Piana, Vázquez and Mansur2009); hacia el norte en Auca-Mahuida a 350 km en la provincia de Neuquén (Barberena et al. Reference Barberena, Fernández, Rughini, Borrazzo, Garvey, Lucero and Della Negra2019; Rindel et al. Reference Rindel, Pérez, Barberena, MacDonald and Glascock2019); y hacia el sur, a 260 km en sitios de la zona boscosa de Cholila de la provincia de Chubut (Bellelli et al. Reference Bellelli, Carballido and Stern2018; Stern Reference Stern2018). A esta lista se agrega el curso medio de la cuenca del Río Cautín, en la región de valles centrales del área centro sur de Chile a 170 km hacia el noroeste de la fuente.
En cuanto al grupo químico NS/MEL, presenta una distribución oeste de 217 km y <200 km en sitios insulares de Isla Mocha; hacia el norte, en la costa, a 270 km, en el sitio La Candelaria; y hacia el sur nuevamente registro costeros del sitio Quilo, a 370 km de la fuente (Campbell et al. Reference Campbell, Stern and Peñaloza2017; ver Figura 4).
Finalmente, el grupo químico PC1 presenta la mayor distribución geográfica: se lo encontró en el Golfo de San Matías en la costa Atlántica, a 560 km al este, en Isla Mocha a 270 km al oeste, en Tapera Moreira a 350 km al noroeste y a 370 km al sur (Stern Reference Stern2018).
Entre las características macroscópicas observadas del conjunto analizado se destaca que la muestra 1 presenta corteza en su cara dorsal. Aunque la redondez que presenta usualmente sugiere que se trata de la recolección de una fuente secundaria (rodados), la presencia de pátina de hidratación carente de piqueteo o corteza rugosa nos hace pensar que pudo haber sido obtenida en un ambiente de depositación no dinámico, más acorde al de los domos que componen las fuentes primarias de la región (Pérez et al. Reference Pérez, Giesso and Glascock2015). La muestra 2 del grupo químico NS presenta talla bipolar y restos de un dorso cortical con pátina de hidratación sin piqueteo, pero la reducción bipolar de este instrumento sugiere que se trata de un rodado y podría provenir de una de las tantas fuentes secundarias (Figura 4) que se distribuyen por gravedad hacia la base de los Nevados de Sollipulli (Godoy Reference Godoy2014; Stern et al. Reference Stern, Christian, Navarro and Muñoz2009). La muestra 3 es una punta de proyectil pedunculada del grupo químico CP-LL1. Su presencia concuerda con las observaciones de Schobinger (Reference Schobinger1958) sobre la representación de puntas apedunculadas en la mitad superior de la provincia de Neuquén (Argentina), ocupando mayormente la cuenca del Río Neuquén, y puntas pedunculadas en la porción sur, principalmente en la cuenca del Río Limay. Pérez y colaboradores (Reference Pérez, Giesso and Glascock2015, Reference Pérez, Giesso and Glascock2019) han sugerido que sería adecuado extender las observaciones de Schobinger (Reference Schobinger1958) al sector occidental cordillerano y que se correspondería, en forma aproximada, al norte y sur del cordón Mahuidanche-Lastarria. Otras puntas pedunculadas pequeñas fueron encontradas en contextos cerámicos, y especialmente dentro del último milenio, en los sitios Cabeza de Indio 1, Alero Colicó 1 y 6 y en Casa Fuerte Santa Sylvia —es decir, en sectores occidentales del área de distribución argentina a latitudes similares. La presencia de esta punta de proyectil pedunculada apoyaría las expectativas de este modelo, ya que proviene de la cuenca del Río Limay y Villa JMC-1 Labranza se encuentra en el sector transicional del cordón mencionado.
La muestra 4 es un filo natural con rastros complementarios de obsidiana color negro, del grupo químico PC1. Esta variedad cromática, si bien es la más común en las fuentes primarias y secundarias, contaba sólo con menciones en conjuntos líticos de Isla Mocha (Campbell et al. Reference Campbell, Stern and Peñaloza2017). Finalmente, la muestra 5 es una variedad polícroma negra con vetas grises del grupo químico NS/MEL, que no contaba con descripción previa dentro de la variabilidad interna del grupo químico.
En síntesis, las obsidianas del sitio Villa JMC-1 Labranza presentan rangos iguales o inferiores a los 200 km lineales de distancia a sus fuentes de procedencia (como puede verse en la Figura 4), y se encuentran dentro del límite superior del rango de movilidad anual de grupos cazadores recolectores, específicamente dentro del rango potencial de adquisición directa de grupos terrestres patagónicos (ver también Stern Reference Stern2018). Sin embargo, debemos mencionar que, dado el tamaño de la muestra analizada, deberían ampliarse los análisis para poder corroborar las hipótesis propuestas de una manera más robusta. Mencionamos previamente que hay dos formas de planificar el aprovisionamiento de materia prima, integrado o “embedded” (Binford Reference Binford1979) y no integrado (Bamforth Reference Bamforth1986). Mientras el primero incorpora el aprovisionamiento dentro de la movilidad para la adquisición de otros recursos básicos de subsistencia como los alimentos, en el segundo caso incluye viajes especiales logísticos a lugares no vinculados a la adquisición de alimentos (Gould y Saggers Reference Gould and Saggers1985; Taçon Reference Taçon1991). En el caso de la movilidad y adquisición de obsidianas, se han realizado estimaciones a partir de fuentes primarias de grupos químicos de la Patagonia meridional, donde a partir del porcentaje decreciente respecto a su distancia a la fuente, un umbral del 60 al 15% entre sitios fue sugerido como indicador de límites entre acceso directo e indirecto a la fuente a una distancia aproximada de 140 km (Borrero y Barberena Reference Borrero and Barberena2006; Stern Reference Stern2018; Zubimendi y Ambrústolo Reference Zubimendi, Ambrústolo, Guiance, Flammini and Barberena2011). Respecto al aprovisionamiento indirecto, generalmente, entre sociedades igualitarias los artefactos de materias primas exóticas circulan en el marco de redes de intercambio y alianzas sociales. El motivo de estas redes es establecer vínculos económicos y sociales para acceder a artículos no disponibles, tener acceso a otros territorios en momentos de escasez de recursos y acceder a parejas potenciales para el matrimonio, entre otras posibilidades (Haury Reference Haury, Church and Francis1994; López Reference López2007; Meltzer Reference Meltzer, Ellis and Lothrop1989).
Por todo esto, distinguir entre un abastecimiento directo o indirecto es un trabajo bastante complejo, ya que existen diferentes casos de equifinalidad (Meltzer Reference Meltzer, Ellis and Lothrop1989), por lo que la evidencia aquí presentada no es concluyente. Sin embargo, abordar la problemática nos sirve para reflejar que no se observaría necesariamente una correlación directa entre circulación de bienes exóticos y jerarquías sociales, ya que también es una forma de materializar y mantener relaciones sociales entre sociedades igualitarias.
Finalmente, a excepción del cabezal lítico del grupo químico CP-LL1, la mayoría de los instrumentos analizados son informales (sensu Andrefsky Reference Andresfky1994). Por esto, consideramos posible plantear a partir de Villa JMC-1 Labranza que los valles centrales presentan estadios secuenciales o intermedios en el proceso de producción lítica regional (Ericson Reference Ericson, Ericson and Purdy1984), y se conformaría así como un posible locus equidistante entre las fuentes de aprovisionamiento efectivas del sector cordillerano y la precordillera oriental y los sitios insulares de la costa pacífica. Debemos tener en cuenta que la mayoría de los sitios analizados se tratan de espacios formales de entierro, y las evidencias de sitios de actividades múltiples donde pudiese haber una mayor diversidad artefactual no han sido abordadas de la misma manera. Esto podría afectar la presencia/ausencia de núcleos y desechos de talla de las materias primas aquí discutidas, así como la interpretación de los sistemas de producción. Se vuelve necesario discutir y analizar los conjuntos líticos en su totalidad.
Consideraciones finales
Si bien la muestra analizada es pequeña, los análisis realizados nos permiten ampliar las hipótesis de trabajo sobre la circulación de obsidianas en la región bajo estudio. Como mencionamos en la introducción, se trata de un trabajo exploratorio. Los estudios no destructivos permitieron analizar instrumentos completos e identificar la presencia de tres grupos químicos, dos de ellos distribuidos en el sector oriental cordillerano a diferentes latitudes, y en menor cantidad en una fuente del sector occidental. Respecto a la selectividad de materias primas por atributos macroscópicos como los cromáticos, la misma podría sostenerse a partir de la presencia de 80% de variedades polícromas —es decir, la de menor disponibilidad en las fuentes de NS y PC1, donde abundan las variedades monocromas, mientras que en CP-LL1 predominan las variedades polícromas. En el caso de la variedad polícroma negro-rojo, la presencia de corteza con pátina de hidratación sin piqueteo o rugosidades sugiere un aprovisionamiento más selectivo, y posiblemente de la fuente primaria de procedencia (Beck et al. Reference Beck, Taylor, Jones, Fadem, Cook and Millward2002; Ericson Reference Ericson, Ericson and Purdy1984; Jones et al. Reference Jones, George, Jones and Hughes2003), pero sin olvidar que se trata de acompañamientos funerarios, donde pueden existir criterios selectivos de artefactos y materias primas que excedan la cotidianeidad. En este sentido, podría vincularse con algún tipo de identificación, como plantean Peñaloza y colaboradores (Reference Peñaloza, Roberto Campbell, Stern, Otero, Svoboda and Banegas2019); sin embargo, consideramos que deberían ampliarse las muestras a analizar para poder ampliar las discusiones.
Los resultados obtenidos en este artículo amplían la distribución espacial del grupo químico CP-LL1, procedente del Cerro Las Planicies y la costa nororiental del Lago Lolog y Río Quilquihue en la provincia de Neuquén, Argentina, con dataciones de aproximadamente 1000 años aP en la República de Chile.
Otro resultado significativo es la identificación de varias fuentes de procedencia de la variedad cromática rojo-negro, la cual ha sido comúnmente asignado macroscópicamente a PC1. En el sitio Villa JMC-1 Labranza, esta proviene de dos lugares diferentes, distribuidos a ambas vertientes de la cordillera de Los Andes, e incluye la fuente de aprovisionamiento más cercana al sitio como los Nevados de Sollipulli. Respecto a la selección por color de la obsidiana PC1, se identificó por primera vez en el sector continental occidental cordillerano un artefacto informal (Andrefsky Reference Andresfky1994) de obsidiana negra, variedad cromática más abundante del grupo químico PC1.
Finalmente, el resultado de este análisis refuerza nuestra hipótesis, ya que la ampliación de muestras y el uso de metodologías de análisis no destructivas permitió identificar la presencia y aumentar la frecuencia de grupos químicos de vertientes opuestas de la cordillera de los Andes, sumándose a un número mayor de evidencias que sugieren una territorialidad que integró ambos márgenes como un mismo territorio en momentos del período Alfarero temprano.
Agradecimientos
A los/las colegas Miguel Chapanoff Cerda y María José Rodríguez del Museo Regional de la Araucanía, Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos, Chile, por el acceso y la colaboración para el análisis de las obsidianas de Villa JMC-1 Labranza. Al Dr. Michael Shott por la bibliografía aportada, y especialmente a los evaluadores del manuscrito, cuyas observaciones y recomendaciones nos permitieron mejorarlo sustancialmente. Este trabajo fue realizado y financiado en el marco de los proyectos internos 2018PRO-AP-02 y 2020PRO-AP-01, AEP-IR, Dirección de Investigación de la Vicerrectoría de Investigación y Postgrado, Universidad Católica de Temuco y FONDECYT Regular 1200251 AEP-CO-I.
Declaración de disponibilidad de datos
Los artefactos analizados se encuentran en depósitos del Museo Regional de la Araucanía, Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos, Chile (se detalla # caja y bolsa en la descripción de la muestra). Los datos químicos completos derivados de ED-XRF corresponden a los análisis UCT-0078, UCT-0080, UCT-0081, UCT-0082 y UCT-0098 del Laboratorio de Cultura Material, Departamento de Antropología, Universidad Católica de Temuco.
Conflicto de intereses
Los autores declaran que no hay ningún conflicto de intereses.