En su conferencia de prensa anual, que tuvo lugar el 30 de mayo de 1995, el presidente del CICR, señor Cornelio Sommaruga, mencionó, en primer lugar, el quincuagésimo aniversario del final de la Segunda Guerra Mundial y deploró elfracaso moral de la Institución en lo atinente al holocausto, «por no haber sabido ir más allá del marco jurídico limite que le habían trazado los Estados».
Comentando la gravedad de las situaciones conflictivas en el mundo de hoy, especialmente en Bosnia-Herzegovina, en Ruanda y en Chechenia, el presidente puso de relieve la responsabilidad de los Estados cuando se ven confrontados con graves violaciones del derecho internacional humanitario.
La Revista publica a continuación el texto de la declaración preliminar del presidente del CICR: